Ucrania ataca bases aéreas a miles de kilómetros dentro de Rusia en una audaz operación militar
Por Svitlana Vlasova, Victoria Butenko, Tim Lister y Mitchell McCluskey, CNN
Ucrania ejecutó ataques con drones a gran escala contra varias bases aéreas en el interior de Rusia y destruyó decenas de aviones de combate, según el Servicio de Seguridad Ucraniano (SBU).
La operación, denominada ” Spiderweb”, se produce en vísperas de las esperadas conversaciones de paz en Estambul entre Rusia y Ucrania, y supuso los ataques simultáneos más ambiciosos contra bases aéreas rusas llevados a cabo por Ucrania desde el comienzo de la guerra.
Más de 40 aviones rusos estaban “ardiendo en masa” en cuatro bases aéreas, dijo la fuente.
La SBU, la agencia de inteligencia interna de Ucrania, dijo que los ataques causaron daños estimados en US$ 7.000 millones y alcanzaron al 34% de los portamisiles de crucero estratégicos de Rusia en sus principales bases aéreas.
Ucrania planeó la operación durante más de un año y medio y utilizó 117 drones para ejecutar los ataques, dijo el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, en un discurso pronunciado el domingo por la noche.
“La planificación, la organización y todos los detalles fueron perfectamente preparados. Se puede afirmar con seguridad que se trata de una operación absolutamente única”, declaró Zelensky.
Un video publicado en redes sociales, geolocalizado por CNN a siete kilómetros al sureste de la Base Aérea de Belaya, en la región oriental rusa de Irkutsk, parece mostrar un dron saliendo de un cobertizo de madera cargado en un camión, mientras se eleva humo al fondo. Las imágenes también muestran drones apilados dentro de lo que parecen ser cajas de madera con techos retráctiles antes de la operación.
“La ‘oficina’ de nuestra operación en territorio ruso estaba ubicada directamente al lado de la sede del FSB en una de sus regiones”, dijo Zelensky en X.
Según la fuente de Seguridad, se sabe que más de 40 aviones fueron alcanzados, incluidos bombarderos estratégicos TU-95 y Tu-22M3 y uno de los pocos aviones de vigilancia A-50 que quedan en posesión de Rusia.
Los ataques parecen tener como objetivo enviar a Rusia el mensaje de que Ucrania aún podría ejercer presión más de tres años después de la invasión no provocada de Rusia. Kyiv ha acusado al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de no querer poner fin a la guerra, mientras Moscú intensifica sus ataques y operaciones ofensivas, incluyendo el lanzamiento de su mayor ataque con drones contra Ucrania desde el inicio de la guerra la noche del sábado.
La operación, que se gestó durante más de un año y medio, consistió en introducir drones de contrabando en territorio ruso y ocultarlos en casas móviles de madera sobre camiones, según la fuente de seguridad. Posteriormente, se abrieron los techos a distancia y los drones se desplegaron para lanzar sus ataques.
Un funcionario del gobierno dijo a CNN que la administración de Trump no fue informada previamente sobre la operación.
“¡Estamos haciendo todo lo posible para expulsar al enemigo de nuestra tierra! Los atacaremos por mar, aire y tierra. Y, si es necesario, los alcanzaremos incluso desde el subsuelo”, aseguró el SBU en un comunicado.
Un alto funcionario de defensa de Estados Unidos dijo a CNN que el ataque de Ucrania mostró un nivel de sofisticación que no habían visto antes.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, recibió actualizaciones periódicas mientras viajaba a la Base Conjunta Andrews el domingo, pero aún no ha hablado con sus homólogos ucranianos, dijo el funcionario.
Los aeródromos atacados incluían Belaya en Irkutsk, a unos 4.500 kilómetros de la frontera de Ucrania con Rusia, y la base de Diaguilevo en Riazán, en el oeste de Rusia, a unos 520 kilómetros de Ucrania, que es un centro de entrenamiento para la fuerza de bombarderos estratégicos rusos. La base de Olenya, cerca de Múrmansk, en el Círculo Polar Ártico, a más de 2.000 kilómetros de Ucrania, también fue atacada, según la fuente, así como la base aérea de Ivánovo, a más de 800 kilómetros de Ucrania. Ivánovo es una base para aviones de transporte militar rusos.
El Ministerio de Defensa ruso confirmó que Ucrania había bombardeado aeródromos rusos en cinco regiones el domingo, y los calificó de “ataques terroristas”.
El ministerio indicó que los ataques fueron repelidos en las regiones de Ivánovo, Riazán y Amur, pero que “varias aeronaves” se incendiaron en las regiones de Múrmansk e Irkutsk.
No hubo víctimas como resultado de los ataques, continuó el ministerio, y agregó que “algunos participantes en los ataques terroristas han sido detenidos”.
El gobernador de la región de Irkutsk, Igor Kobziev, dijo que se habían lanzado drones desde un vehículo cerca de la base de Bélaia. Kobziev declaró en Telegram que no se había determinado el número exacto de drones desplegados. Añadió que los servicios de emergencia y seguridad se encontraban en el lugar.
Los drones del SBU atacaban a los aviones que bombardean ciudades ucranianas cada noche, según la fuente del SBU.
Un video proporcionado por la fuente supuestamente muestra el aeródromo de Belaya en llamas y la voz del jefe del SBU, el teniente general Vasyl Malyuk, comentando la situación. “Qué bonito se ve ahora el aeródromo de Belaya. Aviones estratégicos enemigos”, dice.
CNN pudo confirmar la ubicación de ese video, así como otros dos publicados en redes sociales que mostraban humo saliendo de la base aérea de Belaya. No pudo verificar de inmediato otros materiales proporcionados por el SBU.
La fuente del SBU afirmó que la operación fue “muy complicada desde el punto de vista logístico”, debido a que los drones se transportaban dentro de casas móviles de madera que habían sido trasladadas a Rusia en camiones.
Los drones estaban ocultos bajo los techos de las casas, que ya estaban sobre camiones. En el momento oportuno, los techos se abrieron a distancia y los drones volaron para atacar a los bombarderos rusos.
Un video, supuestamente de un ataque, parece mostrar drones elevándose desde un vehículo mientras circulan por una carretera. Otra imagen muestra el techo del camión en el suelo.
La fuente añadió que los implicados ya estaban de regreso en Ucrania.
La operación ucraniana se produjo tras un ataque ruso la noche del sábado con 472 drones, el mayor ataque con drones perpetrado por Moscú desde el inicio de la guerra. Ocurrió el mismo día que un misil ruso impactó un campo de entrenamiento utilizado por las fuerzas ucranianas, que causó la muerte de al menos 12 personas y heridas a más de 60.
También ocurre poco después del derrumbe de dos puentes en las regiones occidentales de Rusia fronterizas con Ucrania en circunstancias poco claras.
Esta serie de acontecimientos se produce cuando Rusia y Ucrania se disponen a reanudar las negociaciones de paz el lunes. Las conversaciones, que se celebrarán en Estambul, se han visto afectadas por la incertidumbre. El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha expresado su frustración por la resistencia de Vladimir Putin a avanzar en las conversaciones de paz.
Putin propuso mantener “conversaciones directas” en Turquía a principios de este mes, pero nunca se presentó, a pesar de que Zelensky accedió a reunirse.
Finalmente, ambos países enviaron delegaciones de bajo nivel para negociar.
Un borrador de la delegación ucraniana enumera los principios clave para las conversaciones, que incluyen un cese del fuego total e incondicional, el intercambio de prisioneros, la liberación de rehenes y el regreso de los niños secuestrados.
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Frankie Vetch, Eve Brennan y Catherine Nicholls, de CNN, contribuyeron a este informe.
