Muere un destacado militar de Rusia en una explosión en el interior del país, según las autoridades
Por Kosta Gak, Anna Chernova y Rob Picheta, CNN
Un vicegobernador ruso y destacado veterano de la guerra de Moscú en Ucrania murió en una explosión en el sur de Rusia en la madrugada de este jueves, informaron las autoridades.
Zaur Aleksandrovich Gurtsiev, de 29 años, murió junto a otro hombre en una explosión ocurrida en una calle de Stavropol, que, según los investigadores, se cometió con un artefacto explosivo casero.
“Como parte de la investigación, se está inspeccionando el lugar del incidente, se están haciedo exámenes y se están llevando a cabo las diligencias necesarias para determinar todas las circunstancias del incidente”, declaró el Comité de Investigación de Rusia en un comunicado.
Un video que circuló en línea y en medios estatales parece mostrar el momento de la explosión, que ocurre justo cuando Gurtsiev se encuentra con el otro hombre en una calle oscura, cerca de una hilera de autos estacionados.
Después de la explosión, las imágenes parecen mostrar a Gurtsiev tendido en el suelo, mientras que el segundo hombre es arrastrado hacia atrás por la explosión.
El hombre que murió en la explosión de Stavropol junto con Gurtsiev alquilaba un apartamento en un edificio cercano al lugar del incidente, según informaron los servicios de emergencia al medio estatal TASS.
El gobernador regional, Vladimir Vladimirov, escribió en Telegram que “se están considerando todas las versiones, incluida la posibilidad de un atentado terrorista” que involucra a Ucrania.
Gurtsiev había participado en el programa “Tiempo de Héroes”, creado por el presidente Vladimir Putin, para promover a veteranos de la guerra de Rusia en Ucrania a puestos oficiales en el gobierno. Su nombramiento como vicegobernador regional fue anunciado personalmente por Putin.
Según el sitio web de Tiempo de Héroes, “Gurtsiev, a pesar de su relativa juventud, lideró la parte aérea de la operación para liberar Mariupol”.
“Introdujo sus desarrollos en la tecnología para apuntar misiles, lo que les permitió aumentar considerablemente su precisión y eficacia, lo que incluyó el ataque a la base de suministro de Azov”.
Las fuerzas rusas tomaron el control de la ciudad portuaria de Mariupol en 2022 tras un brutal asedio de 86 días, una de las batallas más mortíferas y destructivas desde que Moscú lanzó su invasión a gran escala de Ucrania hace más de tres años.
Según estimaciones de las Naciones Unidas, el 90 % de los edificios residenciales resultaron dañados o destruidos en Mariupol durante los ataques rusos, y alrededor de 350.000 personas, de una población de 430.000 antes de la guerra, se vieron obligadas a huir.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, declaró en una entrevista a principios de este año que se cree que 20.000 civiles murieron, aunque CNN no pudo verificar esa cifra de forma independiente. Funcionarios ucranianos acusaron a Moscú de intentar encubrir pruebas de bajas civiles, una afirmación que el Kremlin niega.
Gurtsiev es el último de varios militares rusos que han muerto en el país durante el último año, un período en el que las consecuencias de la guerra de Moscú se han sentido cada vez más a nivel nacional.
El mes pasado, las autoridades rusas acusaron de terrorismo a un agente de los servicios especiales ucranianos, tras ser detenido en relación con la explosión de un coche que causó la muerte del general ruso Yaroslav Moskalik, subjefe de la Dirección Principal de Operaciones del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas.
Y en febrero, Armen Sarkisyan, fundador de una milicia prorrusa en el este de Ucrania, descrito por las autoridades de Kyiv como un “cerebro criminal”, murió tras un atentado con bomba en el centro de Moscú. El atentado tuvo lugar en un complejo residencial de lujo de la capital, según informó entonces el medio estatal TASS.
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