Exjefe de policía de Arkansas que se fugó de prisión ha sido recapturado, según la oficina del sheriff
Por Zoe Sottile, Taylor Romine y Chris Boyette, CNN
Grant Hardin, exjefe de policía de Arkansas que cumplía condenas por asesinato y violación hasta que se fugó de prisión, ha sido recapturado, según la Oficina del Sheriff del Condado de Izard.
Hardin, de 56 años, llevaba más de 10 días prófugo tras escaparse de la prisión el 25 de mayo, vistiendo lo que las autoridades describieron como un uniforme improvisado de policía. El exjefe de policía del pequeño pueblo de Gateway, Arkansas, cumplía una condena de 30 años por asesinato y dos de 25 años por dos cargos de violación cuando escapó.
Fue capturado el viernes por la tarde, a solo 2,4 kilómetros al oeste de la prisión, según una publicación de Facebook de la oficina del sheriff. Perros rastreadores detectaron un rastro en la zona y Hardin fue detenido poco después por agentes del orden de Arkansas y la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, según un comunicado de prensa del Departamento de Correccionales de Arkansas.
Hardin fue trasladado de regreso a la Unidad Central Norte, de donde escapó, para ser identificado mediante huellas dactilares y para evaluaciones físicas iniciales tras su captura.
Posteriormente, fue trasladado a la Unidad de Máxima Seguridad Varner en Gould, Arkansas, donde llegó el viernes por la noche y permanecerá alojado de ahora en adelante, según Rand Champion, portavoz del Departamento de Correccionales de Arkansas.
Hardin será entrevistado en los próximos días para intentar descubrir “cualquier detalle significativo que permita comprender mejor tanto la fuga como el tiempo que estuvo prófugo”, declaró Champion.
“Gracias al gran trabajo de las fuerzas del orden locales, estatales y federales, los habitantes de Arkansas pueden respirar aliviados y puedo confirmar que el violento delincuente Grant Hardin se encuentra nuevamente bajo custodia”, declaró la gobernadora Sarah Sanders en el comunicado. “Agradezco a todas las fuerzas del orden que contribuyeron a su captura y agradezco especialmente al Gobierno de Trump y a la secretaria Kristi Noem, quien envió un equipo de la Patrulla Fronteriza que fue fundamental para rastrear y detener a Hardin”.
Su fuga desencadenó una intensa búsqueda en el terreno accidentado y rocoso del norte de Arkansas, cerca de la prisión, afectado por las fuertes lluvias. La zona incluye numerosas cuevas y antiguas dependencias, lo que ofrece al fugitivo muchos lugares donde esconderse. Las autoridades informaron a principios de semana que creían que podría haber abandonado el estado.
La zona por la que Hardin había viajado, cerca de un río no muy lejos de la prisión, había experimentado crecidas debido a las fuertes lluvias de las últimas semanas, “lo que probablemente limitó sus opciones para desplazarse por la zona”, declaró Champion. Los equipos de búsqueda ya habían registrado la zona, pero las crecidas inicialmente limitaron su capacidad para investigar a fondo, añadió Champion.
Había estado encarcelado desde 2017 tras declararse culpable de asesinato en primer grado por la muerte de James Appleton, según documentos judiciales.
Las autoridades estaban utilizando todos los recursos a su disposición, incluyendo perros, drones y aeronaves, según lo permitía el clima, entre otros métodos, según declaró previamente Rand Champion, portavoz del Departamento Correccional de Arkansas.
Hardin fue acusado de dispararle en la cabeza a Appleton, quien trabajaba para el departamento de agua de la ciudad de Gateway, mientras conducía por una carretera a aproximadamente 800 metros de su casa, según documentos judiciales.
“Es un hombre muy malvado”, declaró a CNN la hermana de Appleton, Cheryl Tillman. “Estoy segura de que la gente de Gateway está preocupada por su posible fuga de prisión después de lo que ha hecho”.
Dos años después de declararse culpable de asesinato, Hardin se declaró culpable de dos cargos de violación después de que su ADN, ingresado en la base de datos de ADN de Arkansas tras su declaración de culpabilidad, se relacionara con la violación de la maestra Amy Harrison en 1997 en la cercana ciudad de Rogers, según documentos judiciales.
“Es extremadamente peligroso”, declaró el exfiscal del condado de Benton, Nathan Smith, a KHBS, afiliada de CNN. “Ya ha demostrado que no tiene ningún fundamento moral que le impida hacer nada”.
Hardin tuvo una larga trayectoria en las fuerzas del orden y se desempeñó brevemente como jefe de policía de Gateway, un pequeño pueblo de Arkansas con poco más de 400 habitantes.
Sin embargo, muchos de sus trabajos terminaron con su despido o su renuncia, según informó el Arkansas Democrat Gazette.
En el momento del asesinato de Appleton, Hardin era agente penitenciario en el Centro Correccional Comunitario del Noroeste de Arkansas en Fayetteville, aproximadamente a una hora al sur de Gateway, según el Gazette.
Su fuga se produjo días después de que un grupo de 10 reclusos de una cárcel de Nueva Orleans realizara una fuga igualmente descarada, lo que desencadenó una búsqueda nacional. Dos reclusos siguen prófugos más de dos semanas después de la fuga.
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